El camino de Santiago es una de las rutas más emblemáticas y populares de Europa, con miles de peregrinos que lo recorren cada año en busca de aventura, espiritualidad y conexión con la naturaleza. Una de las etapas más interesantes de este camino es la que va desde Burgos hasta Hontanas, una ruta que combina historia, paisajes impresionantes y una experiencia única para el peregrino.
Burgos es una ciudad con una rica historia y una gran importancia en el camino de Santiago. Fue fundada en el siglo IX y desde entonces ha sido un punto clave en la ruta jacobea. En la actualidad, es una ciudad moderna y cosmopolita que atrae a turistas de todo el mundo, pero conserva su esencia medieval en su impresionante catedral gótica, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Además, cuenta con una amplia oferta de alojamiento, restaurantes y actividades para los peregrinos que deciden comenzar su camino aquí.
Una vez que el peregrino sale de Burgos, comienza una etapa de 30 kilómetros de recorrido hasta llegar a Hontanas. A lo largo del camino, el peregrino se encontrará con paisajes de gran belleza, como la Sierra de Atapuerca, famosa por sus yacimientos arqueológicos, o el valle del río Arlanzón, rodeado de campos y pueblos típicos de la región.
Durante esta etapa, el peregrino también se encontrará con varios pueblos y aldeas que ofrecen una parada perfecta para descansar y reponer fuerzas. Uno de ellos es Tardajos, un pequeño pueblo con una iglesia románica y una fuente que se ha convertido en un lugar de encuentro para los peregrinos. También se encuentra el pueblo de Rabé de las Calzadas, conocido por su famosa fuente del peregrino y su tradicional fiesta de San Juan.
Además de la belleza natural y los pueblos con encanto, esta etapa del camino de Santiago también ofrece una gran riqueza cultural y religiosa. A lo largo del recorrido, el peregrino se encontrará con numerosas iglesias, ermitas y monasterios que muestran la importancia histórica y espiritual de esta ruta. Uno de los más destacados es el monasterio de San Juan de Ortega, un lugar de gran belleza arquitectónica y espiritualidad que atrae a muchos peregrinos.
Pero el camino de Santiago no es solo un recorrido turístico, es una experiencia enriquecedora para el peregrino que busca conectar con su interior y con los demás. Durante esta etapa, se puede disfrutar de la compañía de otros peregrinos de diferentes nacionalidades, compartir historias y vivir momentos inolvidables. Además, también se pueden realizar actividades como la tradicional peregrinación nocturna a la Cruz de Hierro, un lugar emblemático en el camino donde los peregrinos dejan una piedra como símbolo de sus cargas y preocupaciones.
En definitiva, la etapa del camino de Santiago que va desde Burgos hasta Hontanas es una experiencia única que combina historia, naturaleza, espiritualidad y encuentro con otros peregrinos. Un recorrido que no solo es una aventura turística, sino una oportunidad para reflexionar y desconectar de la rutina diaria. Sin duda, una experiencia que todo peregrino debería vivir al menos una vez en la vida. ¡Buen camino!